5 situaciones sobre Grecia contemporánea que encontraste leyendo a Hijo de payasos
Me encanta aprender de los libros, por eso, en Hijo de payasos encontrarás 5 situaciones sobre la Grecia contemporánea que seguro no te diste cuenta o no encontraste en las noticias.
Cuando leo, estoy buscando, además de una historia, informarme de situaciones y de contexto. ¿Te encanta aprender leyendo? ¿Saber sobre medios de viajes y situaciones particulares dentro de cada contexto? Costumbres de personajes, situaciones del país, todo eso. Es como entrar a una pequeña fuente de información valiosa que expande nuestra visión del mundo.
Y cómo me encanta encontrar eso al leer (o disfrutar de una película), busco que en mis historias también se sientan así.
La crisis griega y la Troika: un complejo castillo de naipes
La Grecia actual implica unas dos décadas de conflicto y problemas económicos y políticos que empezaron a intensificarse desde su inclusión a la Eurozona. ¿Por qué razón? Por el euro. La necesidad de salvar la economía griega nunca se trató de una acción filántropa de países como Alemania y Francia, sino un movimiento riesgoso y necesario para que toda la estabilidad económica de la zona euro no se viera afectada.
Si lo vemos desde esta perspectiva, la Troika (organización formada entre el Banco Mundial (FMI) y los países de la Eurozona) no solo buscaba salvar a Grecia, sino a todos los países de una crisis económica que hubiera implicado un retroceso, pero para Grecia implicaba recortes monumentales y una crisis sin precedentes que afectó a todos los griegos.
En Hijo de payasos, varias veces Alexander hace una mención a estos hechos desde su posición resignada y optimista de tratar de hacer lo mejor que puede en su posición. Sin embargo, los recortes gubernamentales, la cantidad de personas que quedaron en la calle, el desempleo y los embargos se volvieron en un paisaje del día a día.
El canal de la nación con música
Durante el año 2013 (donde ocurre la historia de Hijo de payasos), uno de los puntos afectados por la crisis fue el canal nacional de televisión (ERT). El canal fue cerrado en junio, dejando fuera a más de dos mil personas. En julio se creó el nuevo canal DT, pero debido a los pocos puestos aprobados, la programación consistió en películas viejas, retransmisión de conciertos y de programas en RT.
Por esta razón, Ambuj siempre tenía puesto ese canal para escuchar programas y conciertos repetidos. En casa de Alexander no había internet ni computadora.
Alimentos perecederos con vida extendida
En septiembre del 2013, se decidió vender los alimentos perecederos hasta una semana después de la fecha de consumo recomendado cuando esta fecha tenía día y mes, y un mes después para los que manejaban mes y año. Esto creó una ola de indignación de la población.
Evan Karnezis, hermano gemelo de Alexander, expresa su inconformidad en el capítulo 4, junto con otros con los que se encuentran en el metro.
¿Te imaginas ver alimentos “vencidos” en venta en un menor valor?
Recortes en las universidades públicas
En septiembre del 2013, la Universidad de Atenas se ve en la necesidad de cerrar las puertas y bajar a un 75% el salario de su personal debido a los recortes de la crisis. Este hecho no se menciona directamente en la historia: Alexander es practicante y todo su tiempo estaba dentro del hospital de Pireos. Sin embargo, el hecho de que Evan dejara de estudiar porque la universidad a la que iba cerró debido a la crisis es una muestra de cómo todos los sectores del país estaban sufriendo con las restricciones de la Troika.
Campamentos de inmigrantes y xenofobia
Lamentablemente no es algo nuevo en Europa, sin embargo, en medio de la crisis griega, también sobrevino una enorme crisis migratoria a través de Turquía, desde donde ingresaban personas de medio oriente huyendo de la guerra. En Grecia se instauraron diversos refugios de apoyo para inmigrantes que llegaban por parte de organizaciones internacionales (como la ONU) para tratar de darle apoyo a las personas que entraban a través de la frontera a un país que apenas podía sostener a su propia población.
Cuando Alexander encuentra a Ambuj, recuerda que el otro mendigo que peleaba con él y había partido su bastón le gritaba «extranjero». La xenofobia se disparó durante esos años que, entre los recortes, también los barrios se llenaban de migrantes que buscaban nuevas oportunidades de vida, al punto que nació un partido político neonazi llamado Aurora Dorada (que Evan menciona también), cuya premisa era cimentar el nacionalismo griego, la memoria de los tiempos de gloria e ir en contra de migrantes y personas de la comunidad LGBT.
Irónico perseguir la homosexualidad en un país cuya historia está impregnada de ello.
Pero esta frase del artículo me llegó:
Los buenos de esta historia también son fáciles de identificar. Son trabajadores de ONG o voluntarios griegos que hacen lo posible para ayudar a los refugiados, muchos de ellos hambrientos, enfermos o sin techo. Pertenecen a esa reducida y heroica clase de personas que uno ve en todos los rincones de la tierra donde hay masas de gente pasándolo mal, pero en este caso su altruismo es especialmente sorprendente: ellos mismos padecen las consecuencias de la crisis económica que ha arrasado a su país, sabiendo que muchos de sus compatriotas compiten por comida con los refugiados en los basureros de Atenas.
John Carlin, artículo EL PAÍS sobre la migración en Grecia, publicado en marzo del 2013.
¿Habías escuchado estas noticias de Grecia hace 8 años?
¿Sabías de la crisis?